Martina Povedano
La vinculación de mi profesión con la salud la tenía clara desde pequeña. El hecho de poder acoplarla con mi afición, cómo era el deporte, más concretamente el baloncesto, supuso una revelación, la suma perfecta.
Mis orígenes como podóloga pertenecen a Barcelona, puesto que mientras cursaba el máster me compaginaba en distintas clínicas. Fue entonces cuando se me presentó la oportunidad de trabajar en IMPULS.
Este cambio resultó un salto seguro para poder formar parte de un equipo de profesionales.
Gracias a los conocimientos compartidos, mis fundamentos han ido evolucionando con el tiempo. De manera que el enfoque biomecánico aprendido durante los años académicos, se ha visto influenciado por la integración de todo el cuerpo.
La interpretación de las lesiones en este sentido me ha aportado un gran abanico de alternativas a la hora de escoger tratamiento.
De todos modos, el propósito siempre es y será, encontrar el origen de la problemática y actuar pensando en la globalidad del paciente.